La Virgen del Carmen volvió a procesionar por las calles y las aguas de Algeciras, las de su bahía. Bendecida quedaron. Salió del templo de La Caridad, que lució su nueva vieja fachada y una espadaña restaurada. Un Día del Carmen de reencuentros y fervor.
Tras la salida procesional de la Virgen del Carmen desde la Capilla de la Caridad, la Tuna de Ingenieros cantó una salve. Muchos devotos algecireños acompañaron a la Patrona de los marineros y al cortejo, que estuvo formado por diferentes hermanos de la Archicofradía Carmelita. En esta ocasión, los sones musicales de la procesión llegó de la mano de los músicos que constituyen la Banda Maestro Tomas Infante.
Tras avanzar por la calle Tarifa y procesionar por las calles del centro, la Virgen llegó al muelle, donde se produjo su embarque en el remolcador Aitana del Carmen para la bendición de las aguas de la bahía. La esperaban con ganas muchos devotos, por tierra y mar. Los barcos acompañaron a la Patrona por las aguas en un ambiente entre la fiesta y la devoción. Finalmente se produjo su regreso a su templo que supuso el broche de oro a los actos.
El Ayuntamiento de Algeciras estuvo presente en el cortejo procesional, de la mano del alcalde, José Ignacio Landaluce, y de miembros del equipo de gobierno. Junto a ellos han procesionado el presidente del Consejo Local de Hermandades y Cofradías, Manuel Delgado Cerro, y el hermano mayor de la Archicofradía del Carmen, José Manuel Sánchez Bautista. Así como un nutrido grupo de representantes de las Hermandades y Cofradías de la ciudad, encabezadas por sus hermanos mayores.
El Rinconcillo, puro fervor
La barriada marinera de El Rinconcillo vivió la jornada del Día del Carmen con especial fervor. Sobre las 17:20 horas, tras la misa en honor a la Virgen, la talla procesionó su corto recorrido hasta una playa abarrotada. Salves, vítores, "guapas", "vivas" y mucha emoción. Llegó hasta la orilla frente a Los Pulpos, y ante la mirada de cientos de personas, embarcó para pasear por las aguas rinconcilleras. Posteriormente, fueron las mujeres la que cargó a Patrona por la orilla de la playa hasta su templo.