"Una vez le dí un coche de juguete a un niño de cuatro años, que se lo llevó al pecho y no paraba de preguntarme si era para él. La madre me dijo que nunca había tenido un juguete y creía que se lo iban a quitar". Esta solo es una de esas historias que recuerda y emociona a Francisco Carrascal, presidente de 'Reyes Magos 98', una asociación que ayuda a sus Majestades de Oriente para que ningún niño de Algeciras se quede sin regalo en la mañana del 6 de enero.
Francisco Carrascal lleva más de 25 años recogiendo juguetes en Algeciras. A través de donaciones de empresas y particulares, el onubense afincado en Algeciras recopila a lo largo del año diferentes regalos que reparte a asociaciones y organizaciones de la ciudad para que posteriormente se lo entreguen a las familias más necesitadas.
El cuarto Rey Mago afronta la campaña de este año con altas expectativas. "Estoy muy contento. Si las empresas que me ayudan todos los años siguen puedo llegar a los 1.500 juguetes o un poco más", ha compartido Francisco Carrascal para el micrófono de 8Directo. "Ahora mismo llevo repartido unos 1.000 juguetes", ha añadido.
A lo largo de estos casi 30 años de historia, 'Reyes Magos 98' ha repartido decenas de miles de juguetes. "A principios de los 2000 y en 2014 o 2015 recogía más juguetes, ahora cuesta más porque las fábricas no me venden como ocurría antes", ha señalado. "Cada año la gente sabe lo que hay, estoy muy contento de que la gente venga al almacén y vea el trabajo que se hace", ha considerado.
Aunque la campaña de recogida está en su pleno apogeo a finales de año, la realidad es que Carrascal no descansa. "Estoy todo el año recogiendo juguetes, cuando es tiempo de comuniones o de cumpleaños, recibo juguetes que no le gustan a los niños o que lo tienen repetido", ha asegurado el cuarto Rey Mago. Además, realiza diferentes actos y actividades para recaudar dinero y así poder comprar juguetes. Un ejemplo de ello es el puesto que tiene en el mercadillo de Algeciras todos los martes. Allí pueden encontrar artículos de papelería, conchas pintadas o pequeños juguetes, entre otras cosas.
Carrascal seguirá siendo el cuarto Rey Mago de Algeciras hasta que no puedo más. "La sonrisa de un niño vale mucho y cuesta muy poco. La cara de felicidad de un niño es lo que me dan ganas de seguir trabajando", ha concluido.