El Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), dependiente de la Consejería de Cultura y Deporte, ha presentado los resultados de la restauración de un traje de buzo clásico de la primera mitad del siglo XX, perteneciente a la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras. Al acto asistieron el subdelegado del Gobierno en el Campo de Gibraltar, Javier Ros, la delegada territorial de Turismo, Cultura y Deporte, Tania Barcelona, el presidente de la APBA, Gerardo Landaluce, y el director general del IAPH, Juan José Primo, junto con concejales del Ayuntamiento de Algeciras como Juana Cid, Ángel Martínez y Patricia Bueno.
El proceso de restauración ha permitido, por un lado, revertir el deterioro de las piezas, causado por la fragilidad de los materiales y el paso del tiempo, y por otro, mantener la estructura original del traje para su exposición en posición vertical, lo que permite apreciarlo tal como lo llevaría un buzo.
Dado el carácter heterogéneo de los materiales que componen el traje, la intervención se llevó a cabo en dos sedes del IAPH: en Sevilla y Cádiz. En los talleres del Centro de Intervención del Monasterio de la Cartuja, se realizaron los tratamientos sobre el textil y se reforzó la estructura interna con espuma de polietileno. Mientras tanto, el Centro de Arqueología Subacuática (CAS), también dependiente del IAPH, se encargó de la limpieza, estabilización de la corrosión y protección de los elementos metálicos.
Los criterios seguidos en la restauración se basaron en un estudio exhaustivo de la pieza y en el respeto absoluto a su integridad y valor histórico. La intervención fue mínima y estrictamente necesaria, aplicando métodos reversibles y utilizando materiales especializados en conservación patrimonial.
Las investigaciones del IAPH sugieren que el traje fue fabricado en Barcelona por la empresa Gimeno Carbonell, proveedora de equipos de buceo para la Armada Española a mediados del siglo XX. Esta hipótesis se confirma en el caso de las escafandras, que llevan grabadas las marcas de autoría. Es probable que el textil también proceda de la misma firma, que entre 1953 y 1957 se anunciaba como fabricante de "trajes estancos para inmersiones submarinas".
Este equipo de buzo fue utilizado por el personal de la antigua Junta de Obras del Puerto de Algeciras, organismo creado en 1906. Sus labores incluían reparaciones de embarcaciones, construcciones portuarias y recuperación de objetos y buques sumergidos.
Históricamente, cabe recordar que Cádiz, El Ferrol y Cartagena fueron las primeras ciudades de España en contar con escuelas de buceo, creadas en el siglo XVIII a raíz del naufragio del navío San Juan de Alcántara en 1786, frente a las costas de Peniche (Portugal). En aquel operativo participaron 30 buzos españoles y 5 extranjeros, quienes lograron recuperar 150 toneladas de monedas de oro y plata.
Una pieza única
El traje de buzo clásico de Algeciras es un ejemplar excepcional dentro del patrimonio cultural andaluz. En España, se conservan pocos modelos similares, algunos en colecciones museísticas como el Museo Massó de Bueu (Pontevedra) y el Museo Marítimo de Barcelona. Estos trajes derivan del diseño original de Augusto Siebe, quien en 1837 patentó el primer traje de buceo cerrado.
Tanto Javier Ros como Tania Barcelona destacaron la labor del IAPH en la conservación del patrimonio del Campo de Gibraltar, con proyectos emblemáticos como la actuación paisajística en la ensenada de Bolonia, en el entorno del Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia. Asimismo, agradecieron la colaboración de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras en la preservación de este legado histórico.
Por su parte, el presidente de la APBA, Gerardo Landaluce, mencionó el Plan de Conservación y Puesta en Valor del Patrimonio Histórico de la institución, que incluye la restauración de este traje. Dicho plan abarca la rehabilitación de bienes inmuebles como el fuerte de la Isla Verde y los faros de Camarinal, Carbonera e Isla de Tarifa, además de más de 400 elementos muebles. Según Landaluce, muchos de estos objetos formarán parte de la exposición del futuro Museo y Centro de Interpretación de la Autoridad Portuaria, en el marco del proyecto puerto-ciudad del Lago Marítimo. “Nuestro objetivo es conservar, recuperar y divulgar el legado histórico y patrimonial, una misión en la que hemos invertido casi 3 millones de euros en los últimos tres años”, ha indicado el presidente.
Características del traje
El traje, confeccionado con lona impermeabilizada con caucho natural vulcanizado, mide 147 x 189 cm. Su equipamiento incluye dos escafandras de bronce y latón, dos botas y un escapulario de plomo, elementos que servían de lastre para que el buzo pudiera permanecer en el fondo marino sin ascender involuntariamente.
En la abertura del cuello, el traje presenta una junta de goma y doce orificios, diseñados para ajustarse mediante tuercas y pernos a las escafandras. Este mecanismo garantizaba un cierre hermético, permitiendo que el buzo trabajara seco y protegido del frío, independientemente de su posición bajo el agua.