‘El Porrúo’: “Sueño con arrastrar un avión”

08 de Agosto de 2016
El-Porrúo-7
El-Porrúo-7

Juan Carlos Heredia, de 43 años y más conocido como ‘El Porrúo’, no puede ni quiere dejar de causar admiración. Mide 1,92 metros de altura y pesa 168 kilos en estos momentos aunque se puede plantar en más de 170 kilos en las temporadas de competición. Su envergadura no es lo más sorprendente.

El campeón de España de 'strongman' es capaz de arrastrar durante varios metros de un camión de 35.000 kilogramos y sueña con poder arrastrar un avión aunque todavía la empresa que gestiona los aeropuertos españoles, AENA no se lo ha permitido.

Pero detrás de estas medidas y las hechuras que tiene, con unos bíceps que llegan a medir hasta 62 centímetros, ‘El Porrúo’ es una persona tranquila, afable, con un muy buen sentido del humor y unido a Palmones y sobre todo a su mujer Mónica y a la hija de ambos, que ahora tiene siete añitos y estudia en el colegio Casa de la Virgen.

Nos citamos en el Templo del Porrúo, que es el gimnasio que regenta en la aldea marinera de Palmones y que se encuentra situado justo al lado de las instalaciones de Juventud Palmones C.F. De hecho, desde su gimnasio se puede acceder al campo de fútbol del Juventud. Nos llama tanto la atención su imponente aspecto, que lo primero que le preguntamos es la típica pregunta que le hace todo el mundo.

Pregunta. ¿Cuál es tu menú diario?

El Porrúo-3Respuesta. Esto casi siempre me lo preguntan porque me ven tan grande… Dependiendo de la fase de la temporada en la que esté me decanto por un menú u otro. Si estoy en fase de competición, tengo que quemar muchas calorías y por lo tanto comer grandes cantidades de comida.

Mi dieta principal son los hidratos de carbono, que los obtengo del arroz, y las proteínas que las saco de la ternera. A mí la ternera siempre me da mucha fuerza. Tomo aproximadamente un kilo de ternera diario en competición y tomaré un kilo y algo de arroz todos los días.

Para mí, un desayuno normal sería un bollo integral y una tortilla francesa de unos seis huevos. Además, me tomo un batido que está compuesto la mitad por proteínas y la otra mitad por hidratos de carbono. Y no me olvido de tomar tampoco un complejo vitamínico.

P. ¿De dónde viene el nombre de El Porrúo?

R. ‘El Porrúo’ es un mote. Yo de pequeño ya aspiraba a ser muy grandote. Ya mi madre me echó al mundo con un peso de 5,800 kg. Y ya de pequeñito me llamaban Porrúo porque era muy grande, tenía las manos muy grandes. Yo creo que era una forma más suave de llamarme ceporro y me llamaron Porrúo.

P. ¿Cómo fue tu niñez? ¿Fue feliz o tuviste algún problema?

R. Yo nací en La Línea y me he criado en La Línea. Mi niñez fue como la de cualquier otro niño. Eso sí, he sido más grande de lo normal. Debido a mi altura, opté por el baloncesto y estuve jugando aquí en el CBL, después en Algeciras, en provinciales y finalmente me fichó el equipo de Los Barrios. Fuimos los que ascendimos entonces a la Liga LEB y eso sería en la temporada 97-98.

P. ¿Cómo pasaste de jugar al baloncesto a dedicarte a levantar pesas?

R. Ese año dejé el baloncesto. En Los Barrios ficharon a un fichaje bueno en mi posición y luego ya me dediqué a las pesas, que siempre han sido mi afición. Yo ya pesaba 115 kilos sin hacer pesas y en menos de un año me puse en más de 150 kilos. Las pesas las asimilé bastante bien.

El Porrúo-5P. ¿Cómo empezaste a meterte en el mundillo de las competiciones de fuerza?

R. Yo siempre he sido un tío muy competitivo en todos los aspectos, tanto en el nivel deportivo como en los negocios. Vi lo que eran las competiciones de fuerza y el primer año que competí en Press-Banca conseguí el título de España en Press-Banca y press-banca resistencia y conseguí marcar un récord que aún sigue vigente, que son 265 kilos en Press Banca Raw.

P. ¿Y de ahí al Strongman?

R. Esta competición se me hacía un poco corta. Siempre había visto en la televisión cuando llegaba la señal de los canales alemanes como la RTL y la DSF y la Eurosport y me quedaba maravillado con las competiciones del Strongman, el hombre más fuerte del mundo. Yo me miraba y veía mi físico bastante parecido al de ellos. Fue difícil al principio porque lo que había era mucho desconocimiento de ese deporte aquí en España. Empecé a investigar y el primer año que competí, como no tenía los materiales adecuados, quedé segundo, sin practicar. El año segundo, me tomé la revancha, me hice con el material y conseguí ser el hombre más fuerte de España.

P. ¿Durante cuánto tiempo has sido el hombre más fuerte de España?

R. Actualmente lo sigo siendo. Desde 2013, el campeonato del hombre más fuerte de España no se realiza. Se hace una liga, pero lo que es el título homologado no. El último que se quedó con el título homologado fui yo. Hombre, hay gente fuerte en España pero se puede decir que el título homologado sigue siendo mío.

El Porrúo-11P. ¿Has realizado muchas exhibiciones de fuerza?

R. Los logros más importantes para mí han sido conseguir por primera vez el título de el hombre más fuerte de España, que lo veía entonces como muy lejano y ganarlo me dio prestigio y me hizo muchísima ilusión. Ya después empecé a competir a nivel internacional. Eso fue un paso muy grande. Era un deporte muy pequeño en España y competíamos con Bélgica, con Holanda y otros países en los que ya estaba consolidado y ya llevaban una tradición increíble como deporte. Había un paso muy grande. Mi mejor marca fue quedar cuarto en un campeonato del mundo, y me quedo con eso porque venir de no ser conocido y quedar cuarto fue un gran logro para mí.

P. ¿Tiene alguna comparación el Strongman con el deporte vasco de levantamiento de piedras?

R. A los ‘harrijasotzailes’ o levantadores de piedras vascos los conozco personalmente. Ellos me invitaron a una exhibición en Basauri (Vizcaya). Ellos levantaban piedras y yo realizaba una exhibición de Strongman. Los dos son deportes de fuerza y cada uno en lo suyo es muy bueno. Ellos lo tratan ya como una tradición. Son hombres muy técnicos aunque luego los sacas de su ámbito y no se manejan igual de bien. Los vascos manejan la piedra pura y dura. Eso sí, ambos nos sorprendimos mutuamente del deporte y de la habilidad del otro. Pero me quedo con que son gente muy agradable y muy hospitalaria y me lo pasé muy bien.

El Porrúo-1P. ¿Qué es lo más bestia que has hecho?

R. Mi marca de arrastre fue arrastrar una Eurogrúa que son 35.000 kilos o 35 toneladas. Hoy por hoy es el mayor arrastre que se ha hecho en España. Ahora estamos tratando y me han puesto muchos impedimentos de la empresa que gestiona los aeropuertos españoles, AENA, para arrastrar un avión. Yo con eso ya me retiro. La verdad es que siempre he querido arrastrar eso. Visualmente arrastrar 40.000 kilos es una auténtica pasada. Pero con las ganas que tengo lo arrastro sí o sí. Mi sueño siempre ha sido arrastrar un avión. He estado haciendo gestiones en Canarias pero me he encontrado con la oposición de AENA. Eso sí, seguiré intentándolo.

P. Además de exhibiciones de fuerza también te hemos visto en cine y televisión. ¿No es así?

R. Sí. Yo lo veo como un medio de promoción para mi trabajo. Tú puedes ser muy fuerte, tú puedes ser el mejor pero si estás metido en una cueva no te conoce nadie. Gracias a eso tengo dos sponsors, obtengo beneficios y me gano la vida. Si salgo en El Hormiguero de Antena 3 todo el mundo ve la marca que patrocino y está impresa en la camiseta, si salgo en Juan y Medio también. Eso es lo que quieren los patrocinadores, que la marca sea visible.

Hoy por hoy, este es un deporte que no tiene ayudas de ninguna clase y si llegan patrocinadores, bienvenidos sean. He abierto abanico en estos campos por aparecer en los medios de comunicación masivos.

P. ¿Nos puedes decir en qué programas has aparecido?

R. Estoy trabajando con Pablo Motos en el Hormiguero, él me llama de vez en cuando y me dice, “Porrúo, vamos a hacer esto o lo otro”. He hecho 12 programas con Juan y Medio en Menuda Noche en Sevilla, he estado con Buenafuente tres veces, con Paz Padilla, me he recorrido casi todos los platós.

P. ¿Y en películas?

R. A nivel de películas, en Torrente 4. Me pasó una cosa muy curiosa y es que la Paramount Pictures se fijó en mí para promocionar la película Hércules en España. Hércules tenía que hacer sus famosos 12 trabajos y me pusieron en la puerta para hacer distintas exhibiciones de fuerza. Estuvo bien, que vengan de la Paramount a Palmones, la verdad es que está genial.

P. ¿Del mundo de la representación, qué es lo que más te ha llenado?

R. He tenido la oportunidad de hacer teatro. Hice una gira por toda Europa con la productora llamada La Casa de la Fuerza, con Angélica Liddell. la mejor productora a nivel español. Nos llegaron a dar un premio. Esta obra de teatro era una forma de explicar la fuerza de la mujer, con el maltrato físico y psíquico que se le hace. Yo salía diez minutos al final de la obra. La verdad es que trabajar con Angélica Liddell fue todo un privilegio.

El Porrúo-4P. Cambiando de tema, tu gimnasio es tu templo. ¿Cómo empezó todo?

R. El gimnasio lleva abierto desde 2001. Estas son instalaciones cedidas por el Ayuntamiento, el local es municipal. Trabajo con los chavales de toda la zona y los intento educar deportivamente en todos los aspectos. Me adapto a todo lo que quieran. No pretendo que todos los chavales que vienen al gimnasio sean Porrúo, cada uno tiene una idea de la fuerza que quiere desarrollar o se entrena por un motivo distinto. Me adapto a todo, incluso a clases de mujeres. Para que un negocio funcione tiene que adaptarse a todas las especialidades.

P. ¿Era tu sueño abrir este gimnasio?

R. La verdad es que sí. He tenido ofertas de todo tipo, e incluso para hacer una película de miedo y yo sería el malo de la película. Pero eso suponía irme a Barcelona dos meses y dejar el gimnasio desatendido. Lo que tengo claro que mi futuro y mi negocio es mi gimnasio. El resto de trabajos o las ofertas de interpretación las utilizo como si fueran ‘bolos’ o apariciones, que te ayudan en tu trabajo porque hoy por hoy hay que hacer de todo. Pero no puedo dejar todo por intentar ser un actor y dejar esto porque puede salir mal, y quemar mi imagen demasiado pronto.

Además, mucha de la gente que viene a Palmones a mi gimnasio es para verme y ver cómo entreno y si no estoy presente, cuando lleve cuatro o cinco días y no me vea, el cliente va a decir: “Para qué me he venido de Algeciras, si tengo otro gimnasio más cerca de casa”. Vienen porque estoy yo aquí.

P. ¿Qué es lo mejor de vivir en Palmones?

R Yo puedo hablar más de Palmones porque trabajo aquí y vivo en Guadacorte. Palmones es un pueblo es muy familiar, nos conocemos todos y aquí nunca he tenido ningún problema. Llevo 21 años viviendo en Palmones, fíjate tú. Además, cuando organizo un evento, el Ayuntamiento de Los Barrios se vuelca. De los Barrios y de Palmones se me llena la boca cada vez que hablo. Quizá se pueden molestar un poco los de La Línea porque siempre que voy fuera ‘vendo’ Los Barrios y Palmones. Sí que es cierto que nací en La Línea, pero me siento barreño y palmoneño. Voy a muerte con Palmones y Los Barrios.

El Porrúo-6P. Ya vamos acabando, ¿cómo te encuentras de salud? ¿Crees que este estilo de vida te puede afectar?

R. Por ahora, gracias a Dios, me encuentro perfectamente. Ponerme así no me ha costado trabajo. A partir de 170 me puede producir problemas a nivel articular. Pero ahora mismo no puedo parar porque tengo muchos compromisos y muchas competiciones y estoy aguantando. Cuando llegue a los 50, aflojaré. Ahora todavía estoy apretando todo lo que puedo. Esto es como un oficio.

P. ¿Cómo te gustaría terminar la entrevista?

R. Me gustaría decir que la mitad de todo lo que he conseguido se lo tengo que agradecer a mi mujer, Mónica, que es el pilar de mi vida. Sin una mujer que me apoyara, no habría llegado ni a la mitad de lo que he llegado. Ella y mi niña de siete años son la alegría de mi vida.