Tras más de 15 horas de reunión en la sede de la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía, la última propuesta de Acerinox para que la factoría de Palmones continúe siendo viable es la presentación de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) una vez que la plantilla retome el trabajo.
El encuentro acabó a las 02.30 de la madrugada con la intención de la compañía de ejecutar un ERTE y no un ERE como se había planteado en un primer momento. Tras muchas horas de debate y negociación, la compañía entiende que es la única forma de que la factoría barreña siga siendo rentable y se pueda mantener el quinto turno tal y como pedían las centrales sindicales. Además se logró introducir importantes mejoras sobre la anterior propuesta del IV Convenio Colectivo.
Durante la jornada de este martes los sindicatos UGT, CCOO, USO y Coordinadora, firmantes en el documento, celebrarán asambleas con sus afiliados para explicarles los pormenores del preacuerdo del convenio colectivo. USO la tiene fijada a las 12.30 horas, según ha informado a sus afiliados. Desde USO se valora que "entendemos que antes de 700 despidos es preferible un acuerdo,aunque no nos guste a ambas partes". CCOO convoca a sus afiliados a una asamblea informativa a las 18.00 horas en el auditorio Millán Picazo de Algeciras. Sin embargo, ATA (mayoritario en el comité de huelga) no ha estampado su firma en el documento.
Ya durante la jornada del pasado lunes, durante los recesos en la reunión, el líder de ATA, José Antonio Gómez Valencia, mostró su malestar con el resto de sindicatos y calificó el encuentro en Sevilla como de "encerrona".
No obstante, tras las negociaciones en la sede de la Consejería de Empleo propiciadas por la Junta a través de la mediación del alcalde de Algeciras, un nuevo escenario queda abierto en el conflicto. En un principio, Acerinox apostaba por un ERE que afectaría a unos 500 trabajadores de la factoría más 200 de contratas para cambiar el modelo de trabajo y eliminar el quinto turno para pasarlo a tres. Ahora se plantea un ERTE para intentar funcionar a cinco turnos y poder mantener la mayoría de los puestos de trabajo, al menos durante el tiempo que dure el ERTE.