Solo una maestra de la danza y el flamenco como Sara Baras puede rendir tributo de esta manera al maestro de la guitarra Paco de Lucía. De maestra a maestro. La artista gaditana Sara Baras emocionó anoche al público del Cabaret Festival Algeciras, en la plaza de toros Las Palomas, con su espectáculo 'Vuela' en homenaje al genio de La Bajadilla en conmemoración del décimo aniversario de su fallecimiento. Emoción mayúscula con un espectáculo mayúsculo.
'Vuela' es un fascinante viaje coreográfico dividido en cuatro actos -'Madera', 'Mar', 'Muerte' y 'Volar'- y en quince piezas únicas, en los que, en cada uno de ellos, la bailaora teje una poderosa narrativa con referencias constantes al artista algecireño más universal: 'Vuela', como las bulerías 'Volar' que Paco de Lucía grabó en el disco 'Cositas Buenas'; la silla de enea sobre el escenario, como un trono vacío tras la pérdida del gran maestro; seis potentes haces de luces como las cuerdas de una guitarra, presentes continuamente sobre el escenario, y con diferentes trayectorias, también al cielo; y, como no, los fragmentos de algunas de las obras más célebres del guitarrista algecireño.
Un espectáculo cuidado al más mínimo detalle, con un excelente juego de luces, colores y vestuario, acompañado de un impoluto sistema de sonido, y con una Sara Baras soberbia y elegante, brava y delicada al mismo tiempo sobre el escenario, en el que le acompañó un brillante conjunto de artistas de su propia compañía. La artista de San Fernando zapateó de manera imposible, como si echara a volar, y braceó como solo ella hace, con sus característicos giros, en algunos pases con falda de doble vuelo que imprimía su baile en una preciosa plasticidad, como si por momentos, de nuevo, pareciera que echara a volar. Bailó, y voló, por alegrías, seguirillas, tangos, fandangos, soleá, bulería y hasta por saeta...enmudeciendo en un silencio sepulcral en mucha de estas piezas al público de Las Palomas. Un público entregado que también pudo escuchar la voz de la bailaora y coreógrafa recitando algunos poemas que acompañan a este espectáculo:
“Ya están sonando campanas,
ya está llorando el silencio,
ya están las olas del mar
vagando por tu recuerdo,
ya van pasando las hojas
sobre este manto de incienso
que huele a amor y a pureza,
que sabe a guitarra y sueño, si
estando en vida yo vivo,
estando muerto, yo vuelo”
Bailó sola y acompañada por un excelente cuerpo de baile que se movía al unísono, como un solo pie, como un solo cuerpo, y de manera magistral, como la maestra. No hubo un brazo más alto que otro, ni un taconeo a destiempo, ni una palma, ni un quejío, ni un jaleo que sobrara. El espectáculo 'Vuela' estuvo repleto de significativos y bonitos detalles, como los mantones de redes de pesca. Con ellos también bailaron, y con más mantones, y con abanicos, y con bastones, acompañados en el cante, como no, por las guitarras, los cajones y un maravilloso violín.
Y aunque parecía imposible que el espectáculo fuera a más, Sara Baras explotó al final de este, el culmen de esta brillante interpretación con sus pies y brazos, con el alma y el corazón, dedicando unas sentidas palabras al público de Algeciras en este sentido homenaje al eterno Paco de Lucía: "Qué calor hace en tu tierra, Maestro", dijó tras dos horas bailando sin descanso. "Para mí es un doble honor estar aquí hoy, en la tierra del Maestro", despidiéndose después con un fin de fiesta lleno de celebración y alegría. El Cabaret Festival Algeciras 2024, que comenzó este pasado domingo con la actuación de Niña Pastori, echa abajo el telón este sábado, 10 de agosto, con la actuación del barcelonés Miguel Poveda.