El Gobierno de Gibraltar acusa a la Policía Nacional española de "suspender unilateralmente las medidas provisionales en la frontera" y justifica los controles y colas generadas este viernes en el paso fronterizo como una "respuesta de reciprocidad".
Según explica el Ejecutivo del Peñón en un comunicado, "a las 23:00 horas de ayer, el CEO de la Agencia de Fronteras y Guardacostas (Borders and Coastguard Agency, BCA) notificó al Gobierno de Gibraltar que España había puesto fin a los actuales acuerdos provisionales en vigor en la frontera de Gibraltar, que no obligan a los titulares de la tarjeta roja de residente que entran en España a sellar su pasaporte. Esta medida de España se produjo sin ningún tipo de preaviso", aseguran.
Las autoridades de Gibraltar sostienen que "tras una investigación posterior, quedó de manifiesto que la decisión de suspender las medidas provisionales no había sido adoptada por los ministros españoles de Interior o Exteriores ni se les había notificado. Al parecer, la orden la dio por escrito un Inspector de la Policía Nacional española en La Línea de La Concepción, que no estaba autorizado por su superior a dar esa instrucción".
Ante esto -explican desde el Peñón- el ministro principal de Gibraltar dio instrucciones de que, "a menos que se restablecieran los acuerdos provisionales antes de las 07:00 horas de hoy, Gibraltar optaría, aunque a regañadientes, por la reciprocidad inmediata de trato en el acceso a Gibraltar. De este modo, cualquier nacional de un tercer país que no sea ciudadano británico o residente en Gibraltar deberá presentar un pasaporte para entrar en Gibraltar, que le será sellado". Lo que, a las 07:30 horas, ha formado importantes colas para entrar en Gibraltar, "como consecuencia de las medidas aplicadas por España", señalan desde Gibraltar.
"Incapaz de hacer frente a la gran cola que se había formado, la Policía Nacional española volvió entonces al régimen provisional y dejó de exigir a los gibraltareños con tarjeta roja que sellaran su pasaporte. Sobre esta base, el Gobierno de Gibraltar ha suprimido el requisito de que los nacionales de terceros países que entren en Gibraltar presenten un pasaporte para su sellado", exponen desde el Gobierno del Peñón.
Añaden que "más tarde, durante la mañana, parece que la policía española volvió a sellar los pasaportes de los titulares de tarjetas de identidad gibraltareñas, a pesar de que se les había ordenado verbalmente que no lo hicieran. Ahora se alega que es necesario que la nueva orden se entregue por escrito, ya que la anterior del inspector pertinente se había dado por escrito y debía ser revocada por también por escrito".
Sobre esta base, el Gobierno de Gibraltar ha acordado "dejar pasar unas horas antes de volver a la reciprocidad en caso de que las medidas provisionales no vuelvan a aplicarse. De hecho, se ha restablecido el régimen provisional en la frontera a partir de las 11:30 horas sin necesidad de que Gibraltar volviera a la reciprocidad. La BCA y la Policía Real de Gibraltar (RGP) nos han informado de que España ha revocado la orden anterior y que el sellado de pasaportes ha cesado. Por consiguiente, Gibraltar no volverá a imponer las medidas recíprocas", apuntan desde el Ejectuvio del Peñón.
La postura del Gobierno de Gibraltar es que, a falta de acuerdo, impondrá medidas recíprocas de acceso a Gibraltar en la fecha en que España retire las medidas provisionales actualmente acordadas. Por ello, el Gobierno de Gibraltar aconseja a todos aquellos que deseen cruzar a Gibraltar que se aseguren de llevar siempre consigo su pasaporte.
El ministro principal de Gibraltar, Fabián Picardo, ha declarado que “dada la naturaleza esporádica de la forma en que España, bien a través de instrucciones directas o por capricho de los agentes de la Policía española, ha decidido que puede retirar las medidas cautelares en cualquier momento, lo mejor es que quienes necesiten cruzar la frontera hacia Gibraltar lleven siempre consigo su pasaporte por si nos vemos obligados a pedírselo, como ha ocurrido hoy. Si se suprimen los beneficios que actualmente se conceden a los gibraltareños, el Gobierno de Gibraltar responderá inmediatamente con reciprocidad y sé que todos los trabajadores españoles y todos los visitantes entenderán que tenemos que actuar sobre esta base de reciprocidad. Es lo último que queremos hacer y, como socialista, me deprime enormemente que, como de costumbre, se utilice la política para perjudicar los intereses de los trabajadores y no para ayudarles".
"Seguiré apostando por la consecución de un tratado entre el Reino Unido y la UE, trabajando para conseguirlo, poniendo sobre la mesa propuestas neutrales desde el punto de vista de la soberanía para resolver las últimas cuestiones y dándolo todo para que este proceso sea un éxito. La pelota está en el tejado de España para aceptar aquellas propuestas razonables, equilibradas e imaginativas que garanticen la seguridad del Espacio Schengen y la integridad del Mercado Único. La mejor forma de conseguirlo es mediante las negociaciones en curso y Gibraltar no se verá obligado a someterse mediante tácticas de presión como las medidas aplicadas en las últimas 12 horas. Además, tenemos la oportunidad de continuar con los acuerdos provisionales mutuamente beneficiosos que tenemos ahora que el SES se ha retrasado, y espero que lo hagamos, sin dejar que el acuerdo se dilate más de lo necesario. Estoy del lado de los gibraltareños de a pie y de los trabajadores de Gibraltar y transfronterizos. Quiero que esto funcione para todos. Espero sinceramente que incidentes como éste sean la tormenta que precede a la calma y que podamos resolver los asuntos en la mesa de negociaciones de una manera que funcione para todos y que pueda aplicarse con el apoyo de los ciudadanos”, concluye.