La Línea ha vivido este Domingo de Ramos una de las jornadas más esperadas de su Semana Santa, marcada por el reencuentro con la tradición, la emoción del pueblo y la participación de centenares de fieles. Las dos hermandades protagonistas del día, La Borriquita y Alegría por un lado, y Flagelación y Estrella por otro, han llenado las calles de fe, música y belleza, en una tarde con amenaza de lluvia que finalmente respetó las estaciones de penitencias.
Desde las 17:00 horas, partía desde la Capilla del Colegio Salesianos el cortejo de la Hermandad Salesiana de Penitencia, acompañado por la Banda de Cornetas y Tambores Los Gitanos de Málaga y la Asociación Musical La Lira de Pizarra. Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén avanzaba entre palmas y olivos, mientras María Santísima de la Alegría arrancaba aplausos desde balcones y aceras. Un recorrido lleno de luz, ternura y emoción, donde destacó la finalización del tallado del frontal de la canastilla del paso de misterio y las nuevas cartelas laterales, estrenadas este año.
Minutos después, a las 17:15 horas, tomaba la calle desde Santiago Apóstol la Sacramental Hermandad de la Flagelación, arropada por el cariño del barrio y de toda La Línea. El paso del Señor, con el acompañamiento de la Banda Los Ángeles de Sevilla, fue tan sobrecogedor como siempre. Detrás, María Santísima de la Estrella, con un nuevo manto bordado por el taller de la propia hermandad, se abría paso entre el recogimiento de los fieles, con el arrope sonoro de la Banda Amando Herrero de Algeciras.