Fomentar la cultura de la cooperación y el esfuerzo, del respeto y cuidado al medioambiente, de las segundas oportunidades. Estos son algunos de los principales objetivos del programa 'Economía circular sobre ruedas' puesto en marcha por la Coordinadora Despierta, en La Línea, y que ha sido reconocido recientemente por la Fundación Cepsa con los Premios al Valor Social en su edición de 2021. Despierta, el único centro de día para personas con adiciones acreditado por la Junta de Andalucía en el Campo de Gibraltar, cuenta ya con tres de estos galardones de la Fundación Cepsa. En concreto, esta nueva iniciativa pretende promover el uso de la bicicleta, a la vez que se apuesta por la economía circular, la sostenibilidad y el reciclaje.
"Siguiendo esta filosofía, a los objetos que se estropean les buscamos otra forma para seguir usándolos, contribuyendo con un modelo de producción que garantice un crecimiento sostenible, en contra del modelo tradicional de usar y tirar. Así reducimos la presión ambiental, estimulamos la competitividad y la innovación, y aportamos al crecimiento económico y al empleo. Esta economía circular se aplica, en este caso, a la bicicleta, en un sitio ideal para ello como es La Línea, toda llana", explica a este medio Concepción Álvarez, presidenta de la coordinadora de lucha contra la droga Despierta.
Para ello, para este programa de 'Economía circular sobre ruedas', se ha acondicionado un espacio de las instalaciones de Despierta, calle Xauen 50, como taller bicicletas. "Se trata de un espacio para reparar bicis, un punto de autoreparación, de donación e intercambio de bicicletas, al mismo tiempo que sirve como cápsula de divulgación, con mesas redondas y debates sobre la economía circular y el medio ambiente, donde conocer también los diferentes tipos de bicis que hay, sus herramientas y cuidados esenciales. Este programa también contempla la puesta en marcha de circuitos educativos, infantiles y de adultos, para enseñar todo lo necesario a la hora de subirse a una bicicleta", añade Álvarez, que defiende la idoneidad de este proyecto respecto a los objetivos de Despierta: "No deja de ser un taller formativo orientado al empleo y, de manera transversal, al cuidado del medio ambiente. Suma estos dos aspectos, la formación ocupacional y la sostenibilidad del medio ambiente".
Estas son solo algunas de las tareas que trabajan a diario en Despierta, que este año cuenta con nueve programas en activo. Entre ellos destaca su centro de día para personas con problemas de adicciones, con itinerarios personalizados y distintos talleres ocupacionales (artesanía y reciclado, huertos de ocio), servicio de comida, ropero, ducha y lavandería, escuela de salud y buena vecindad, talleres de habilidades para la incorporación sociolaboral, programa de conciencia a la comunidad, prevención de recaídas y atención a las familias. Más de 2.000 personas fueron atendidas el pasado año en Despierta. Algo respecto a lo que, el número de usuarios, Conchi Álvarez alerta que no deja de crecer: "Está aumentado mucho en este último tiempo".
Ante esto, la labor tan fundamental que desarrollan en Despierta y el ingente trabajo que soportan, desde esta coordinadora demandan, particularmente, más apoyo económico -"tenemos que hacer auténticos milagros y sacar de donde no hay"-; de manera general, no hay dudas, reclaman un Plan Integral para el Campo de Gibraltar y La Línea. "En esta comarca necesitamos inversiones, infraestructuras, planes sociales y educativos. Se creen que controlando el narcotráfico ya está todo hecho y no es así, para nada. La clave está en la educación, en la educación en valores. Así se puede transformar cualquier realidad", expresa convencida la presidenta de Despierta; profesora de vocación, formación y carrera.
Mientras tanto, a seguir trabajando, agradeciendo el respaldo que reciben con iniciativas como los Premios al Valor Social de la Fundación Cepsa. Toda una bocanada de aire fresco. "Este premio es un motivo de orgullo y satisfacción ya que en él vemos reconocida y valorada nuestra lucha de más de treinta años por conseguir una sociedad más justa en un mundo habitable. También es una ayuda monetaria que nos permite poner en marcha nuevos proyectos en beneficio de nuestros usuarios, que de otra manera no podrían ver la luz y que a la vez nos compromete y nos da fuerza para seguir con más empeño, si ello fuera posible, nuestro día a día. Por todo ello queremos dar las gracias a Cepsa por su apoyo a la conservación del medio ambiente y su generosidad con las organizaciones que trabajamos con y por los sectores más desfavorecidos de la sociedad", concluye.