El Domingo de Ramos ha comenzado en San Roque Ciudad con la tradicional Solemne Procesión de Palmas y Olivos, que este año ha visto reducido su recorrido ante la previsión de lluvias. Aun así, numerosos fieles se congregaron desde primera hora, manteniendo viva la devoción y la emoción de este día tan señalado.
El acto dio comienzo en la Plaza de Armas, donde el párroco José Manuel Sánchez Cote procedió a la bendición de las palmas y ramas de olivo que portaban los asistentes. Desde allí, la procesión recorrió las calles Castillo, Siglo XX y finalizó en la Plaza de la Iglesia, con entrada a la Parroquia Santa María La Coronada, donde se celebró la eucaristía.
Entre los asistentes se encontraban la alcaldesa accidental y delegada de Tradiciones, María del Mar Collado, así como otros miembros de la Corporación municipal, que acompañaron a los fieles en este recorrido más breve pero igualmente emotivo.
Cabe recordar que el recorrido habitual parte desde la Capilla de Nuestra Señora de la Visitación y transcurre por varias calles del Casco Histórico, pero el riesgo de precipitaciones llevó a optar por una versión más corta.
Con esta celebración, San Roque conmemora la entrada de Jesús en Jerusalén, dando comienzo a una Semana Santa cargada de fervor, tradición y esperanza.