De cruzar el Estrecho en un barquito de madera a proporcionar servicios aduaneros y logísticos a toda Europa. Partida empezó con un sólo empleado, su propio fundador: Fernando Partida Palma. Desde entonces cuatro generaciones le han sucedido honrando cada uno de sus pasos. El fundador vivía en la Sierra de Cádiz, en Olvera. Todo lo que tenía como patrimonio era un molino de aceite. España se encontraba entonces, en 1923, en conflicto con el país vecino Marruecos. Una decisión lo cambió todo: reinventarse o conformarse. Fernando Partida eligió la primera opción. Decidió ayudar a las tropas españolas y les envió todo lo necesario para sobrevivir en el frente. En pleno trasiego de intercambio de mercancías consiguió el título de Comisionista de Tránsito marítimo.
Cada viaje de Olvera a Algeciras era toda una aventura -o una odisea- en la que podría enfrentarse a bandidos o a un fuerte temporal en el Estrecho. Y así se convirtió en un eslabón de la cadena logística.
El fundador tuvo dos hijos y el legado continuó. José Luis Partida Toledo -uno de los hijos- montó una nueva empresa de mudanzas en el país vecino y afianzó así las relaciones con Marruecos. Con dos empresas familiares, una en Tánger y otra en Algeciras, controlaban el origen y destino de las mercancías. El sucesor de José Luis, Fernando Partida, el actual director de la compañía, dio un paso al frente cuando terminó sus estudios en Madrid y regresó para quedarse en la sede principal.
La industria del Campo de Gibraltar crecía de la mano del Puerto de Algeciras, así como lo hacía el árbol genealógico de los Partida. El mercado fue evolucionando y las navieras invirtieron fuertemente en el puerto. Maersk eligió Algeciras como uno de sus centros logísticos del mundo hace casi 40 años, hecho que supuso el gran impulso del puerto a la vez que trajo empleo, contenedores y mercancías. Algeciras se iba convirtiendo en una carretera de conexión entre Latinoamérica y Sudáfrica con Europa. "Pese a que no toda la mercancía se quedaba aquí, esta era la puerta de entrada para que se distribuyera por toda Europa", explica Álvaro Partida, bisnieto del fundador, que forma parte de la cuarta generación y que recuerda con orgullo que todo empezó con la voluntad de su bisabuelo.
Comenzó con su fundador llevando suministros a Marruecos y hoy son 140 empleados
Hace ya un siglo, cuando el humilde hombre de Olvera se dirigía con un carro y un mulo al antiguo y pequeño puerto para recoger los paquetes y los enviaba a sus destinatarios en un barco, colocados en jaulas o carros. Con el tiempo fue adquiriendo falúas donde se cargaban las mercancías y animales para el aprovisionamiento del ejército español. La empresa pasó de un trabajador, Fernando Partida Palma, hasta llegar a las 140 personas que forman actualmente la plantilla.
Una compañía que ha perdurado en el tiempo gracias a unos cimientos familiares y a la constancia y esfuerzo de cada uno de los miembros antiguos y actuales de Partida. Nadie dijo que fuera fácil. Sin embargo, las cuatro generaciones tomaron ejemplo y conocimientos de la anterior, y sumaron nuevas ideas y enfoques, que han renovado y la impulsan hacia el futuro. La situación del sector y la empresa requirieron de una nueva visión. Álvaro, el bisnieto del fundador, creó entonces un departamento de marketing, expansión de negocios y se encargó de los asuntos comerciales. En 2015 se unieron a Partida dos reconocidas empresas familiares de la ciudad, Algeciras Logística, de la familia Ramos, y Paulete, de Antonio Paulete. Una fructífera fusión que la hizo destacar entre otras compañías del sector y llamó la atención de un grupo inversor que adquirió hace dos años el 100% del accionariado: Everwood Capital.
"Las empresas familiares llaman la atención de las navieras gigantes como Maersk o CMA CGM"
Actualmente, la empresa Partida cuenta con delegaciones en Motril, Almería, Barcelona y Tánger, aunque mantiene su sede principal en Algeciras, en un edificio que todos conocen con su nombre.
La familia asegura que ha recibido este crecimiento y estas oportunidades "con los brazos abiertos". "Estamos ilusionados y comprometidos con los objetivos del grupo inversor para mejorar los estándares de calidad y expansión territorial", reconocen desde la longeva compañía familiar. "En este sector todo es inminente y urgente, da igual si es producto perecedero, que tiene la vida muy corta, o si se trata de confección, tornillos o cualquier otro producto", explica Álvaro en un despacho que conserva la esencia del origen de Partida: tradición y familia, pero adaptándose a los tiempos.
Las pequeñas y medianas empresas, a lo largo de los años, se han hecho imprescindibles y se han convertido en motor principal del puerto algecireño. "Son muchas las empresas familiares en Algeciras que han ayudado a llamar la atención de las gigantes navieras, como Maersk o CMA CGM, y compañías asiáticas que han visto que Algeciras sí tiene esa capacidad para recibir toda esa mercancía de China o Latinoamérica", comenta Álvaro, que hace hincapié en la importancia de las compañías auxiliares, desde la agencia de aduanas, a los mecánicos, los barcos, talleres, almacenes; todas igual de valiosas en el organigrama industrial.
RENOVARSE PARA SEGUIR
¿Cuál es la clave para que una empresa que empezó con un sólo empleado perdure ciento un año? El bisnieto del fundador señala que todo se resume en ofrecer una buena calidad y eficiencia. "Hay que dar un servicio de calidad al cliente, ser rápidos, ágiles y ofrecer tecnología para que ellos mismos puedan conocer de primera mano cómo va su camión o su contenedor. Porque entendemos que para ellos marca una gran diferencia los periodos de tiempo, ya que también tienen a otro cliente al que entregar los tomates, las fresas, las telas o la mercancía peligrosa", subraya.
"Tenemos que darle ese portal para que entiendan que estamos empujando todo lo que podemos. Hacemos todo lo posible para que la mercancía esté lo menos posible en los puertos para cruzar la frontera. Si eres bueno, ágil y competitivo en tus tarifas vas a poder mantenerte. Al final hemos llegado a los 101 años gracias a los clientes", reflexiona Álvaro Partida.
En la actualidad, Partida Logistics sigue reinventándose, se ha subido a la ola de la digitalización de la mano del grupo inversor para acortar los tiempos y eliminar el error humano. Como hizo el fundador en su día, han dado un paso decisivo en su historia que marcará un antes y un después. El legado continúa.